Plataforma10 Laboral
+ Urge
presupuesto multianual
J. Armando Téllez
Flores
LA EDUCACION y la
Salud son aspectos que deben ser prioritarios, pero en el primero de los casos
se requiere que haya presupuestos multianuales y eso debe ser considerado por
el próximo gobierno y por el poder legislativo para solucionar uno de los
grandes males que nos queja en el país, destacó la directora del IPN,
Yoloxochitl Bustamente, tras de asegurar que la institución no está en crisis
económica aunque sí tiene dificultades debido a los decretos de austeridad.
Este año, por ejemplo, el déficit será de 387 millones de pesos si la SEP o la
SHCP le reduce el presupuesto. Destacó
que la falta de recursos impiden estructurar programas y proyectos de manera
más ordenada y eficiente; lo óptimo sería que en la actual legislatura se
aprobaran presupuestos plurianuales y definiera a la educación, junto con la
alimentación y la salud, como una prioridad nacional. Al realizar un balance al
frente del IPN, que concluirá administrativamente en diciembre, expuso que el
reto para el próximo gobierno es ampliar la educación media superior, que
actualmente es de 36 por ciento, para responder, como lo han hecho India y
China, por ejemplo, a los cambios que requiere el país y alcanzar una cobertura
del 50 por ciento Destacó que es necesario poner énfasis en la educación
tecnológica pues se requiere una transformación productiva; y no se trata sólo
de tener más cascarones, sino de proporcionar la infraestructura y los
profesores con experiencias e interesados en nuevos modelos educativos. La asignación de un presupuesto plurianual permitirá
tener posibilidades de estructurar programas y proyectos para crecer de una
manera más ordenada, más armónica y más eficiente. Explicó que en este año, el
78% del presupuesto es destinado simplemente en lo que son servicios personales.
la titular del IPN señaló que generalmente esa institución inicia el año con un
determinado presupuesto, pero a unas cuantas semanas de iniciado el ejercicio
del mismo, aparece un decreto de austeridad que en términos generales significa
un seis por ciento de reducción del presupuesto total para esa casa de estudios
que es del orden los 11 mil 800 millones de pesos. Explicó que en este año, el
78% del presupuesto es destinado simplemente en lo que son servicios personales
y el resto, 22 por ciento, es lo que nos
queda para la operación de una institución que atiende a más de 400 mil
estudiantes, 17 mil profesores, 9 mil personas en el área de apoyo y asistencia
a la educación, eso es lo que nos queda. Este año nos quedaron alrededor de
2,600 MDP para todas esas actividades. En el 2010 el IPN tuvo un déficit de 545
millones de pesos; en el 2011 de 258 millones, y este año se estima que el
déficit sea de 387 millones de pesos. Por ello se ven obligados a estar replanteando,
reorganizando. Pese a este tipo de restricciones, la directora general del IPN,
Yoloxóchitl Bustamante Díez destacó el trabajo realizado a lo largo de los tres
años al frente de la institución, de la cual dijo, le gustaría continuar al
frente. Y fue enfática al señalar que si le gustaría continuar en el
Politécnico…. EL RECTOR de la UNAM, José Narro Robles señaló que el cambio en
el país es inexcusable, y lo que se tiene que discutir es “si lo hacemos en
orden y con la inteligencia como elemento sustancial, o si vamos a permitir que
prevalezcan la fuerza y la improvisación”, advirtió. México, añadió, ha vivido
estancado desde hace varios lustros; ni avanza como debiera en lo económico, ni
resuelve su problemática social. Se requiere un cambio de rumbo, un viraje
sustantivo en el camino, pues el que hemos transitado en las últimas décadas no
nos ayuda a resolver los problemas de siempre, tampoco los de nuevo cuño, y
menos, anticipar los que ya tenemos enfrente. Las transformaciones traen
aspectos positivos, y los tiempos por venir tendrán que ser mejores. Lo que
podemos debatir es por dónde enderezar el rumbo, a qué velocidad emprenderlo, y
por dónde empezar, asentó. Señaló que se debe decidir si somos capaces de
aceptar el desafío, de hacer el diseño institucional y programático que se
requiere, o si sólo habremos de trasladar los moldes de otras sociedades, de no
estar a la altura del reto y de nuestras responsabilidades o, incluso, dejar la
tarea a las próximas generaciones que “con toda razón tendrán la capacidad de
recriminar nuestra determinación de no hacer lo que nos toca”…
(tellezflores@hotmail.com)
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